Ikigai: ¿Para qué vine?
Si ya has encontrado tu propósito y te sientes motivado con las actividades que realizas, si fluyes y eres feliz con lo que haces, seguramente ya has encontrado tu ikigai, de lo contrarío, no te preocupes, aquí te explicaremos la importancia de conocerlo y la manera de hacerlo. Te ayudaremos a entender por qué quieres lo que quieres.
Ikigai es una palabra japonesa que se puede traducir como la razón de ser. El científico Japonés Ken Mogi, en su libro Ikigai esencial, explica que encontrar tu ikigai es encontrar tu razón para vivir.
Comprender las motivaciones que te hacen saltar de la cama, te harán capaz de encaminarte a conseguir tus objetivos. Si consigues encontrar la razón que te motiva a hacer cosas y ponerte en acción, habrás encontrado tu ikigai.
Dedicarte a hacer lo que te gusta, te dará mayor satisfacción y productividad al realizar tus actividades. Para encontrar tu propósito debes mirar en tu interior, es decir, debes iniciar un viaje de autoconocimiento, de lo contrario no sabrás lo realmente quieres.
Si quieres conocer tu ikigai, debes encontrar el punto de intercepción entre lo que amas, en lo que eres bueno, lo que el mundo necesita y por lo que te pueden pagar.
Factores clave y cómo encontrarlos.
Factor 1 – Pasión.
Para definir tu pasión debes identificar tus gustos e intereses y tus habilidades.
La pasión es el motor que te impulsa, es lo que te interesa y te gusta, en conjunción con tu fortaleza y talento (lo que se te da bien hacer y disfrutas haciendo).
Para identificar tu pasión debes hacerte preguntas como: ¿qué actividades disfruto hacer? ¿con cuáles actividades pierdo la noción del tiempo? ¿qué actividades me gustaría aprender constantemente para conseguir ser mejor cada día?
Factor 2 – Profesión.
La profesión es la unión de tus habilidades con las necesidades de tu entorno. Es la herramienta que te permitirá potenciar y aplicar tu talento.
Debes encontrar la actividad o actividades que además de que te gusten, se te den bien y puedan pagarte por realizarlas. Este aspecto le añadirá más valor a tu esfuerzo.
Para encontrar que profesión puede ayudarte a construir tu ikigai debes preguntarte: ¿En que soy bueno? ¿Cómo puedo ofrecer estas habilidades a los demás y recibir un pago por ello?
Factor 3 – Vocación.
Aristóteles decía: “Ahí en donde se encuentran tus talentos y las necesidades del mundo, está tu vocación”, la vocación la encuentras cuando consigues conectar contigo para después conectar con lo que estás dispuesto a hacer por los demás.
Pregúntate ¿utilizando mis habilidades y gustos, qué puedo aportar a los demás?
Factor 4 – Misión.
La misión es proyectar el alcance que quieres tener en los demás a través de lo que amas hacer. Te ayuda a darle sentido a todo lo que haces, es tu propósito.
Para encontrar tu misión debes preguntarte: ¿Para qué quiero hacer lo que quiero hacer? y ¿cómo puedo contribuir y ayudar a crecer a otros con lo que quiero hacer?
Descarga la plantilla para armar tu ikigai y ¡vive tu vocación!
Bonus Tips 😉
- Empieza con objetivos pequeños
- Libérate de las ideas preconcebidas y conecta contigo mismo.
- Busca el equilibrio entre tu armonía y la sustentabilidad (actividades que se puedan realizar a largo plazo y vivir de ellas).
- Alegrarte por los pequeños pasos que vayas dando.
- Celebra cada logro por pequeño que parezca.
- Aprende a vivir en el momento presente.
por Encauce